jueves, 15 de octubre de 2009

Cuesta del Nao



Ya se por qué se veían mal los colores. Porque estaban en CMYK.

Edu y Cris

lunes, 5 de octubre de 2009

A garrotazos



Inspirado en el gran Goya y en una historia bellísima que leí en la prensa: "Durante la guerra de Afganistán un pastor cuidaba sus ovejas ausente de los bombazos que se estaban dando entre talibanes y americanos. A pocos metros de su bucólica situación un soldado americano fue herido en la pierna y caminaba sin rumbo esperando alguna ayuda. De pronto oyó algún ruido del pastor y se encontraron de frente, ambos totalmente alterados. Se supone que el americano sacó su arma e intentó reducirle. Se supone también que el afgano intentó darle explicaciones de que él no pertenecía a guerra alguna y que estaba cuidando sus ovejas tranquilamente. Cuando, pasado el susto, lograron entenderse, el pastor observó la herida del soldado y ni corto ni perezoso le llevó hasta su casa donde le curó y le dió cobijo hasta que se curara la herida. Mientras tanto, en el pueblo se habían enterado de que el buen pastor tenía a su cuidado a un soldado americano. Los jefes del lugar, talibanes, le conminaron a que lo entregará para juzgarle y, evidentemente, matarlo. Según sus leyes, nadie puede entrar en una vivienda si su propietario no le permite. Por tanto, nadie violentó su casa para robar al americano. Al cabo de un mes, una vez totalmente curado y sin que nadie lo viera, el pastor acompañó al soldado hasta dejarle en una situación cercana a las tropas americanas. Una vez libre se supone que cada uno continuó con su trabajo".
Esta historia me recordó el cuadro de Goya e intenté emularlo. Y mientras tanto los señores de la guerra tan tranquilos en sus mansiones.

¡No a la guerra de Irak!



¡Y a cualquier guerra! Inspirado en el Guernica lo pinté absolutamente horrorizado por la decisión de Aznar de meternos en una guerra sin sentido. ¡Cómo les gusta jugar a los soldaditos!