-
¡¡Es nuestra casa!!
-
Sí, nuestra casa del pueblo.
- ¿Cuándo
lo has pintado?
-
Hace muuuchos años. Como otros que ya os he enseñado los pintaba en el verano,
cuando íbamos de vacaciones.
-
¿Hacías una foto y luego lo pintabas?
-
No, porque entonces las máquinas fotográficas tenían carrete. Tomabas la foto y
cuando el carrete (de 24 ó 36 fotos) se acababa había que llevarlo a una tienda
a revelar y hacer las copias. Eso ha evolucionado muchísimo en pocos años.
- Y
¿no podías ver las fotos en el teléfono?
- Se
podía tardar semanas o incluso meses en ver lo que habías fotografiado. De
entrada sólo había teléfonos fijos en las casas. Nadie llevaba uno en el
bolsillo. Por eso yo ponía el caballete delante de la casa y pintaba lo que
veía. En este caso toda la calle que sube hasta el centro del pueblo.
Candela
se queda pensativa. A Jorge le da igual.
- (¡¡Cómo
podríais vivir sin teléfono!!)
No hay comentarios:
Publicar un comentario